Los ancianos merecen vivir una vejez con bienestar, y aunque la aparición de enfermedades es inevitable, existen muchas formas de ayudarlos y mejorar su calidad de vida. En vista de ello, es útil saber sobre cuidadores a domicilio de Beeping, y cómo pueden ayudar a personas mayores enfermas.
Enfermedades más comunes en la vejez
Para algunas personas mayores, la vejez es una etapa agridulce de sus vidas, debido a que pese a ser la época anhelada para descansar y por fin gozar de los frutos de sus esfuerzos, también comienzan a aparecer ciertas
enfermedades de la vejez, las cuales son muy variadas y, lamentablemente, abundantes.
Esto se debe a que, a medida que los individuos van envejeciendo,
los distintos sistemas que conforman el organismo comienzan a desgastarse y perder sus capacidades máximas de funcionamiento, lo que conlleva al desarrollo de patologías y enfermedades como las siguientes:
- Artritis y artrosis. Son las más comunes y afectan a las uniones de las articulaciones, que se van desgastando con el tiempo.
- Enfermedades mentales y neurodegenerativas. Alzheimer, Parkinson y demencia senil, se pueden controlar, pero no tienen cura. Son las que mayor impacto tienen en la calidad de vida de los ancianos y sus allegados.
- Provoca la pérdida de minerales de los huesos, lo cual los deteriora y los deja muy frágiles, siendo propensos a quebrarse.
- Problemas cardíacos. Son la causa principal de mortalidad de personas mayores.
Siendo estas las más comunes, es necesario mencionar que
existen muchas otras enfermedades asociadas con la tercera, como por ejemplo: los problemas respiratorios, obesidad, desnutrición, pérdida de la vista o de la audición, trastornos del sueño, fatiga, depresión, entre otras más.
¿Qué son los cuidadores a domicilio para personas mayores?
Para las personas mayores que sufren una o varias patologías de la tercera edad, es posible que se les dificulte llevar a cabo ciertas tareas y actividades que forman parte de su rutina diaria. Por tal motivo, es necesaria la ayuda o asistencia de otra persona, que por lo general, suele ser un familiar.
Sin embargo, no siempre la familia tiene la disponibilidad o posibilidad de dedicarse a cuidar a la persona mayor. En este sentido, los servicios de cuidadores a domicilio para personas mayores que ofrece Beeping,
se convierten, sin duda, en la mejor opción.
Esto se debe a que los cuidadores son personas formadas en cuidados geriátricos, que han sido seleccionados a través de un proceso minucioso, con el que se busca cubrir todas las necesidades que pueda presentar la persona mayor.
Por tal razón, todos los cuidadores que conforman el equipo de Beeping,
deben tener conocimientos sobre enfermería, para así ayudar en la administración de tratamientos, en la realización de terapias y hasta saber cómo actuar ante casos de emergencia.
Dicho servicio
se ofrece en tres modalidades: internos, nocturnos y por horas. De este modo, los cuidadores se instalan en el domicilio de la persona mayor para ayudarlo en sus actividades diarias que la familia no pueda atender y que el anciano no pueda realizar por sí mismo.
Funciones de un cuidador a domicilio de personas mayores
Tal como se ha mencionado,
las funciones de los cuidadores a domicilio pueden variar de acuerdo con las necesidades de la persona mayor que quede a su cargo.
A pesar de ello, suele existir una serie de tareas comunes que se pueden mencionar, siendo algunas de ellas las que mencionamos a continuación:
- Realizar recados y acompañamientos, ya sea para hacer compras, acompañarlos a citas médicas, ayuda en la movilidad y transporte, entre otros recados.
- Ayuda en el hogar, tales como limpieza, recoger y ordenar, lavar y planchar, recoger y sacar la basura, etc.
- Compañía para jugar, dar paseos, compartir una lectura, cocinar y comer juntos, y otras actividades que hagan sentir menos solos a los ancianos.
- Cuidados y ayuda personal, lo cual involucra asistencia a la hora de la ducha, para vestirse, comer e incluso moverse de un lugar a otro.
Al contar con este tipo de servicios, tanto las personas mayores como sus familiares, tienen la tranquilidad de saber que el anciano está bien cuidado, mejorando su calidad de vida y sensación de paz.